lunes, 27 de julio de 2009

El rollo de siempre.

Y a pesar de todo, parece que al fin y al cabo tengo una extraña facilidad para querer cosas en las que no creo. Al menos durante un rato, como siempre.
También parece que tengo una extraña facilidad para dejar de creer en las cosas que quiero, al menos durante un rato, otra vez.
Y también parece que esos son los ratos en los que peor me siento, en los que además creo creer que jamás volveré a querer creer en nada.


sábado, 25 de julio de 2009

Maniquí.

Que no es que esté mal, pero lo he estado y recordarlo duele, duele casi tanto como cuando lo estuve. Y ahora mismo estoy intentando negarme a aceptar la mayor verdad del mundo, me gustaría poder gritarme en alto a mí misma: ¿Ves como estabas equivocada, gilipollas?'
Algunas veces he querido ser ciega y por ello conseguir ser un poco más feliz tal vez, pero visto que no lo soy y que no soy tan subnormal como para sacarme los ojos, he aprendido a encontrar la felicidad en la aceptación de las leyes naturales.
Porque Dios hizo el mundo en 7 días, y se nota, pero tuvo cuidado para idear la forma de comer gambas en un bar sin tener que preocuparse de las servilletas de papel impermeables: la solución es secarse con las gambas *.*

(Qué sabio este señor de gafas tan guapo, cada día tiene más sentido loque dice).